¿Terminaste una relación y sin darte tiempo para reflexionar has decidido iniciar otra? ¿Esta es una práctica que sueles realizar, pero te gustaría darte la oportunidad de sanar a partir de ahora? Si te sientes identificado, debes saber que este patrón, que a menudo nos lleva a saltar de liana en liana, se conoce popularmente como el Síndrome de Tarzán. En este artículo, te explicaremos qué es el Síndrome de Tarzán. También cuáles son las consecuencias y cómo podemos romper este ciclo para encontrar una verdadera estabilidad emocional.
¿Qué es el síndrome de Tarzán?
De acuerdo con selia.co, un portal en el que se ofrece terapia psicológica de forma online, el síndrome de tarzán es un “patrón preocupante” que se presenta cuando una persona termina una relación y de inmediato comienza otra sin reflexionar antes sobre los errores cometidos.
“Este fenómeno, que toma su nombre del personaje que se balancea de liana en liana sin tocar el suelo, describe a aquellas personas que saltan de una relación a otra sin procesar sus rupturas anteriores”, destaca en su página web.
Este comportamiento —agrega el portal— impide el crecimiento personal y perpetúa las relaciones superficiales.
Consecuencias de las relaciones liana
Quienes presentan el síndrome de Tarzán, se enfrentan a variadas consecuencias. Según Laraferreiro.com, algunas de las más importantes son las siguientes:
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Duelos acumulados
Cuando evitamos el dolor de una ruptura amorosa, las emociones negativas se acumulan. Por lo tanto, si la nueva relación no funciona, es inevitable que la persona se enfrente al dolor de la pérdida actual y al duelo no resuelto de las relaciones anteriores.
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Falta de autoconocimiento
Si se termina una relación, y no se toma el tiempo necesario para reflexionar (tanto en las cosas que salieron mal, como en las que se deben cambiar para mejorar en las próximas conexiones), es muy probable que se sigan cometiendo los mismos errores.
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Relaciones superficiales
También es probable que, al no reflexionar sobre las causas que generaron la ruptura anterior, establezca con la nueva pareja una conexión superficial y poco genuina, ya que solamente se busca llenar un vacío emocional con los otros.
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Poca autoestima y crisis de identidad
Sentir la necesidad constante de estar en pareja puede ser una señal de baja autoestima. Y es que, de acuerdo con la explicación del portal Laraferreiro.com, depender de la validación y aprobación de otros para sentirse valioso, no permite desarrollar una autoestima autosuficiente.
Además, la persona puede perder el sentido de identidad; es decir, el sentido de quién es realmente, lo que afectará notablemente su dirección y propósito en la vida.
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Miedo a la soledad
Quienes presentan el síndrome, también pueden llegar a sentir que la soledad es algo negativo y aterrador; y no una oportunidad para crecer personalmente y descubrir nuevas cosas sobre sí.
Cómo romper el ciclo
Ahora que ya conocemos en qué consiste el síndrome de tarzán, y cuáles son sus consecuencias, en MiCasino.com te presentamos las recomendaciones que Selia.co sugiere para hacerle frente. Veamos:
- Aprende a estar solo: dale otro sentido a la soledad y vela como una oportunidad de crecimiento. Para ello, es fundamental que practiques actividades que te ayuden a impulsar tu autonomía, por ejemplo, viajar.
- Cierra las relaciones pasadas: procura no tener contacto con tu expareja hasta que sientas que superaste la ruptura. Si lo consideras necesario, escribe una carta de despedida (que no necesariamente debas enviar) para expresar los sentimientos reprimidos.
- Fortalece tu autoestima: enfócate en todas esas metas personales que deseas alcanzar. ¿Es una carrera nueva, un emprendimiento? Defínelo y trabaja en ello.
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Ayuda a alguien con este síndrome de tarzán
Por último, si es un amigo o familiar el que atraviesa por esta situación, se recomienda:
- No juzgarlo.
- Escucharlo de forma activa.
- Sugerirle ayuda terapéutica para que sea este profesional el que se encargue de guiarlo en su proceso de sanación.
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