Al retroceder unos cuantos años en el tiempo, se puede decir que Manu Ginóbili ha sido uno de los jugadores más determinantes de la NBA. Por supuesto, esta afirmación puede generar algo de ruido al haber jugadores tan impresionantes que hasta compartieron vestuario con el argentino, como Tim Duncan o Tony Parker, además de otros grandes como LeBron James, Steve Nash, Kevin Garnett. Sin embargo, lo del de Bahía Blanca fue realmente impresionante en la mejor liga de baloncesto del mundo.
Todo lo que Ginóbili hizo en esa época dorada de los Spurs de San Antonio marcó una época al ganar cuatro anillos de campeón (2003, 2005, 2007 y 2014), con Duncan, Parker, y Gregg Popovich en el banquillo. Esto lo llevó a ser catalogado como uno de los mejores sextos hombres de la historia.
Cierto es, que el entrenador hizo encajar las piezas de forma ideal; pero Ginóbili representó el alma de un equipo que se fortalecía cada vez que él salía desde el banquillo y los hacía jugar minutos de ensueño.
En realidad, lo de Ginóbili fue impresionante, la cuestión es que al ver su carrera se puede decir que hay varios que lograron cosas más grandiosas y con mucho más protagonismo; no obstante, la magia del argentino parece que también va más allá que sus proezas en cancha, pues ha implantado un récord que ni siquiera grandes figuras como Jordan, Magic, LeBron, Kobe o Curry han podido realizar.
Nadie iguala a Ginóbili en porcentaje de victorias
Ginóbili consiguió ganar cuatro campeonatos de la NBA, fue nombrado mejor sexto hombre en una temporada 2008, acabó en el mejor tercer quinteto de la liga dos veces (2008 y 2011) y estuvo en dos ocasiones en el Juego de Estrellas (2005 y 2011); sin contar con que los Spurs retiraron el dorsal 20 del equipo, por su gran servicio, y en abril se anunció que entraría al Salón de la Fama de la NBA.
Aunque todo esto es increíble, otros tienen méritos y distinciones similares; pero lo que no tienen y el argentino sí, es que se convirtió en el jugador con mayor porcentaje de victorias en la historia de la NBA, con un 72,1%.
Tal y como informó ‘NBA Stats’ y el portal ‘StatsMuse’, Ginóbili se ha sentado en el trono como el jugador con mejor porcentaje de triunfo de todos los tiempos. Entre los más de 120 basquetbolistas que superan los 1.000 partidos de temporada regular de la NBA a lo largo de la historia, ninguno supera el 72,1% del argentino.
Detrás se sitúan mitos como Parker (72), Duncan (71,9), Danny Ainge (69) y Kareem Abdul-Jabbar (68,8); aunque lo que más sorprende es que ni estas ni otras leyendas del baloncesto puedan equiparar ese porcentaje de victorias del de Bahía Blanca.
Su humildad fue su gran cualidad
A todos esos registros sorprendentes que logró a lo largo de su carrera se le puede añadir uno muy especial que ningún otro jugador tiene, ni siquiera los que figuran entre los mejores de todos los tiempos. Por supuesto que Ginóbili tiene un lugar entre los más legendarios de la NBA, pero este récord lo eleva aún más entre la consideración de muchos.
Con todo y eso, el argentino nunca quiso lucirse por todo lo que consiguió dentro del mejor baloncesto del mundo; de hecho, tras entrar al salón de la fama expresó esa humildad que siempre lo caracterizó al decir que todos sus logros venían del trabajo en equipo.
«Nunca gané un título de máximo anotador, ni un MVP, ni siquiera fui elegido nunca en el primer equipo. Estoy aquí por mi entorno. Los jugadores con los que jugué, los entrenadores y la organización. No lo tomo como un logro individual. Estuve en el lugar correcto en el momento correcto», indicó un Ginóbili que, pese a sus éxitos, calidad, buen juego y habilidad, nunca quiso darse más valor que ninguno de sus compañeros.
Dentro de la NBA, Ginóbili es todo un mito. Su entrega, entereza, humildad y ese talento innegable para jugar lo han convertido en un ídolo de los Spurs y toda una institución dentro de la liga. De jugar en la actualidad seguramente hubiera hecho que muchos ganaran en MiCasino.com, si le apostaban al equipo texano.
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